27 de junio de 2014

Hasta pronto Junio...

Aquí estoy una noche más, otro día, más cerca del sábado, promete ser especial.
Aunque siento que la estoy liando, que vuelvo a meter la pata. Que el miedo vuelve a recorrerme por dentro, para jugar conmigo. O quizá son los nervios. Me siento asustada, cuál niña un día de tormenta y rayos. 
Me cobijo bajo las sábanas, aunque me muera de calor y me entran otra vez esas ganas de llorar.

Estamos en junio, mi mes, supuestamente, mi cumpleaños, el de ese señorito que a veces me saca de mis casillas, el de una pelirroja gallega... Junio es el mes de mil cosas, de que mi cabeza se sature y decida no acordarse ni de la hora que es. Y este año, junio me ha prometido muchas cosas y tengo miedo de que no se cumplan.

Vuelvo a ser otra vez pequeña. Esa niña que corría por el parque para llegar a tiempo a casa y que no le regañaran por llegar tarde. Vuelvo a ser la misma que se ilusionaba con una tontería, pero que le daba miedo no ser lo que la gente esperaba. Vuelvo a ser pequeña, con su presencia y sobre todo con su ausencia. 
Vuelvo a ser la misma niña de hace 11 años, a la que aún le ilusionaba que llegara ese chico a darle su primer beso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario