9 de septiembre de 2017

No todos los días se cumplen 25.

A ver... Vamos a ver... ¿Es que no me conoces ya un poquito? ¿No te enteras que tengo que ser quien quede fuera de la norma? ¿Y que para mi tú estás fuera de la norma? Ea, pues nada, vamos a ver si te lo explico bien...

Primero, no sé si considerarme de las menos afortunadas, o de las más. De las menos por conocerte ahora, llevo con una sensación de haber cometido muchos errores y que contigo o los errores no existen o me los disfrazas, esa sensación de vivir sin preocupación, que los miedos desaparezcan, ¡qué hubiese dado por tener esa sensación antes! De las más, porque qué suerte tenerte, que sí, que eres un payaso, un niño, un pez fuera del agua, que puedo meterme contigo todo lo que el mundo puede ver, pero bien sabes que eres el pez que me ha hecho encontrarme, que recuerda a esta Dory todo lo que se le olvida sin perder la paciencia y es que amigo, ¡qué paciencia gastas conmigo!

Así que, respira hondo, esto será largo. Me llamarás pesada, querrás ahorcarme cuando me veas o quizá logre sacarte alguna lagrimita (lo veo difícil)... Empezamos.

En primer lugar... ¿Son ya las 20.06? Pues... FELIZ CUMPLEAÑOS NEEMO Y sí, así, en negrita, cursiva y subrayado. Que no esté contigo no implica que no me acuerde, que no me haya acordado. Esta es mi forma de acercarme un poquito a ti hoy, me vas a matar, lo sé. Pero con que hoy tengas la sonrisa marcada me conformo.



¿Cómo se te podría describir? Decir el típico friki no creo que sea algo que haga justicia.
Es el típico chico que te presentan y que hasta que no te tiras hablando con el 4 horas no te das cuenta de lo que hay detrás. Es ese chico que ves y dices "tiene algo" pero no sabrías decir bien, el que hace que sin cambiar te des cuenta de que te gusten otras cosas, que te intriga, te saca de tus casillas y no entiendes cómo siendo tan enano tiene tanta fuerza. Que luego en realidad eres un niño grande, pero hay que mala leche te gastas y el miedo que dejas.
Diría que te podrían poner un chip y te encontrarían en Islandia un día de estos. Pero de algo estoy segura y es que eres quien pone la mano en el fuego por quien le importa y que no ahorra en valor si tiene que tirar, que sabe aprender y que jamás se da por vencido, que guarda la inocencia de un niño pequeño en ocasiones y que cambia tanto de parecer como de camiseta. Que tiene una colección de camisetas para robar, pero que de camisas le pueden robar y sólo se enteraría si le faltara una. Que es un loco enamorado de los animales, que si hay alguien que me gana en animal eres tú y que nadie te podría quitar a tus amores felinos, porque sacarías las uñas para defenderlos.-

Gracias por compartir conmigo un 9 más, porque sé que no es otro más que pase de largo, porque me siento feliz de que hoy sea 9 y que pueda llamarte para ver cómo te aburres o como te desesperas conmigo porque soy un caso de mucho cuidado. Gracias por soportarme, por hacer que lo malo sea menos malo, por hacerme ver que hay veces que es mejor saltar y no pensar hasta llegar al suelo.


Gracias por hacerme sentir en las nubes, por los cosquilleos, las tortitas un domingo cualquiera y ese olor a vainilla en un piso de Madrid. Gracias por cogerme de la mano, por tirar de mi y por dejarme que tire de ti. Gracias por dejarme ser quien te apoyara cuando más lo has necesitado.
Gracias por hacer que algunos pocos seamos afortunados de saber cómo eres simplemente de buenas, porque gastas paciencia con nosotros a espuertas. Gracias por darnos la oportunidad de verte sonreír, porque al menos para mí, esa sonrisa se contagia y me quedaría embobada viéndola.

Feliz 25 aniversario Izzy. Felices 25 otoños, felices 25 errores, felices 25 idioteces que harás y ojalá esté para ver, felices 25 series devoradas, felices 25 libros que algún día leerás porque te obligaré, felices 25 cenas y comidas de pizza y sushi, felices 25 destinos que has visto y verás, felices 2'5 horas que simplemente me separan ahora de ti. Felices 25 y espero que otros 25, conmigo.


Gracias por tus primeras palabras escritas para mi, gracias por quedarte con cada detalle tonto y hacer de ello un recuerdo, gracias por tu overbooking, gracias por enseñarme y por dejar que te enseñe, gracias por las críticas que no hacen daño, gracias por dejarte usar de mensajero, por dejarme conocer gente que de otra forma no creo que hubiese conocido, gracias por seguir, por soportar y por no abandonar ni dejarme abandonar el barco, gracias por hacer que cumpla sueños, por los 50kg a cuestas por una feria del libro, por aguantar a 40º, gracias por cogerme la mano cuando sentía que me saldría el corazón por la boca. Gracias por hacer que los miedos decidan irse.
Y recuerda, da lo mismo donde estés, siempre estaré dispuesta a buscarte.

Y que nunca pierda de vista esos ojos que me recuerdan al mar y al cielo. Que son calma y tormenta.-
Todos y uno a uno los venceremos juntos.
あいしてる



15 de mayo de 2017

Niña adulta.

Ella es aún muy niña, pero no lo muestra. Muestra un camino de responsabilidad, de dejar de lado salir y quedarse estudiando un día de octubre o de marzo. Ella es la cabeza amueblada, que para todos tiene tiempo. No necesita que le ayuden (o eso hace creer). Pero cuando está sola aún le gusta jugar a juegos de facebook, le gusta bailar sin preocupaciones y le falla tanto la memoria que tiene que llevar agenda, pero no la típica seria y normal, para ella tiene que llevar algo más.
Aún le brillan los ojos con libros de dibujos y con juguetes para niños. Le encanta perderse en tiendas de juguetes y siempre busca un puzzle a tener pendiente.
Ella muestra que es independiente, que las cosas se tienen que poner muy crudas para necesitar ayuda. Y que puede con los obstáculos que le ponen delante.
Pero necesita ayuda mil veces, aunque la pide a su manera. No es perfecta ni tiene superpoderes. Le gusta correr y reír cuál niño y le encanta soñar con su futura casa y la biblioteca que quiere armar en ella. Le gusta distraer la mente, pero es tan distraída que se le van los años con el mismo puzzle.

19 de febrero de 2017

Domingos

Dormir a tu lado, despertar con tus besos, dar vueltas en la cama mientras hablamos del desayuno, kilómetros recorridos, sueños, ganas y que todo huela a nosotros.

No hay buenos días, hay buenas noches y buenos domingos, despertar a besos y a sexo de ese que nos hace pensar en llevarnos mejor de lo que ya nos llevamos.
Olor dulce en la casa, gofres en el horno, tus besos en el cuello desde la espalda y yo que me derrito como el chocolate del desayuno. Nesquik para desayunar, tú mirándome y a mi que ya con eso me suben las ganas de no separarme de ti.

Domingos distintos, inesperados y de no cansarme nunca de ti. De besarte, abrazarte y pensar que es un sueño. De comida asiática, de besos, de risas de compartir, porque en realidad quiero compartir contigo todo. Y que lo único que me venga a la mente es que aquí no estamos solos.

Quiero mañanas de resaca de noches sin dormir, de comernos con la mirada y con los besos. Mañanas y días completos de no salir de la cama porque en realidad todo lo que quiero lo tengo contigo a mi lado. Días de remolonear, de dar vueltas, de morderte el labio y de distraerte, porque no me gusta que llegues tarde, pero no quiero que te marches.


Todos y uno a uno, los venceremos juntos.-

Pd: Contigo desaparecen todos mis miedos. Sólo necesito tus besos.

6 de febrero de 2017

Tardes.

Una vez más voy de camino a la capital, otro viaje, distinto destino, cruce de trenes, cruce de vidas. Y si es que algo sabía era que Madrid me traería algo especial, no sabía hasta qué punto, ni en qué relación. No sabía nada, pero Madrid no defrauda nunca. Siempre me hace volver.

Vuelvo a mi vida, a retomar viejas y preciosas costumbres. Como dar los buenos días con una sonrisa, aunque me muera de sueño. De sonreír hasta que duele la mandíbula. De llorar si me apetece, de extrañar y de querer. De amar. De saber decir de nuevo que hay que arriesgar. Porque este viaje al fin y al cabo es un riesgo.
Pero sé que este riesgo tiene nombre y que si lo necesito, también tendrá colchón que me salve de la caída al vacío.

Aunque si hay que hablar de riesgos, el mayor riesgo es enamorarme. Estar cual adolescente de 16 y saber que la hostia puede ser tremenda, pero confiar en que él está y estará.



No hay mejores regalos que los que guardan historia, guardan detalles y son algo especial por lo que significan para las partes directamente implicadas.
Gracias por todo lo de hasta ahora y lo que sé que vendrá.

"Todos y uno a uno, los venceremos juntos".-

4 de febrero de 2017

Madrid y su magia

Me mudé a Madrid, aunque sólo sea algo temporal por el momento. Y volvió a hacer de las suyas, volvió a hacerme pensar, a hacerme sentir y poner sentimientos a flor de piel.

Madrid, que yo te quiero, pero me sacas de mis casillas.

Pues ahora, aquí tumbada yo pienso más, tranquilamente, veo los sentimientos que tengo a flor de piel y empiezo a plantearme miedos, porque sí, yo tengo miedos.
La gente me ve como alguien valiente, luchadora, pero tengo miedos y uno de ellos es la posibilidad de estar enamorándome de nuevo. Porque si no, no me explico las ganas de verle y todo lo que un simple "te quiero" suyo me despierta.